Anna Yadira Estrada Alarcón.
Poeta.
Formación académica y artística:
-
Ingeniera Industrial. Instituto Tecnológico de Cd. Cuauhtémoc, Chih.
-
Asiste al taller literario Daniel Sada, impartido por el escritor Raúl Manríquez
-
Pertenece a la Academia Municipal de Artes, donde toma clases de pintura con el Mtro. Esteban López Quezada
-
Ha expuesto en el teatro de Cámara de esta misma ciudad de Cuauhtémoc.
Muestra de obra:
Azules
Te recibo todas las noches,
Mi cuerpo te abriga
Y respiro en la vida
Que tú no has vivido.
En medio de tormentas
He jugado con todos tus demonios
Y entre luces de arco iris
He conocido tu Dios.
Mis pensamientos azules
Te guardan desnuda
Con tus tibias cascadas escarlatas
Que merecen dar vida,
Arrastras mis sueños
Que tú misma no tienes.
Insomnio
Me incitas a permanecer despierta
el plumaje naranja de tu cuerpo
cambia en tibio nido mi mano desierta
obsequias un sonido vagabundo.
El viento permanece estático
lo excita el olor de tu piel canela
tropieza con tu espacio pragmático,
mientras, lento y delicado te besa.
Retomas tu vuelo al nido correcto
caricias nuevas envuelven tu cuello
nidos nocturnos en día perfecto.
Derrocha parte del tiempo en mi nido
cúbreme de besos y muéstrame a tu Dios
déjame pensar que no te has ido.
Mi soledad
El horizonte
delinea tu sonrisa,
el silencio
rodea mi cuerpo,
el amor
permanece mudo,
aún lo tiene sometido
el tedio y la tristeza,
sigue tus pasos y pensamientos
que guarda mi alma,
en esta esclavitud consentida
tu alma no me acaricia.
Pasado
como me cuesta el pasado
cuantos besos en fila
para esta tarde
a destiempo, después
de lo oportuno.
No duelas tanto
recubre de luz las paredes
quitemos fantasmas
y espantapájaros burlones
cuando falte la luna.
La noche
es el momento adecuado
para desvelar tantos besos
en un acto mismo de exhibición
sin señales nocturnas.
En esta sola casona
las sombras bailan eróticamente
¿qué hace falta para que sea tu momento?
no justifiques con excusas
el ¿porqué? de no definir.
Ayer
Arde el ayer fantasma
en esta casa redonda
recubren los sonidos
del corazón de Dios
todas tus palabras.
Juegan ahora
hojas,
secas del ayer...
Otoño
Sigue siendo otoño,
calendario de mi cuerpo,
cielo rojo obscuro,
cólera temible de pasiones
puestas como accesorios,
mi segunda piel.
Piensas todas las jugadas,
te salva mi abrazo
lleno de sueños,
como te sueña mi fantasía
como desvela la verdad,
a juicio nuestro.
Sigue siendo otoño
este papel de mi piel
este delirio
como intento de curación,
último recurso
para mantener nuestra identidad.
Recuerdo
Aquí están tus recuerdos,
gimiendo tu nombre
haciendo caricias en desanimo
dependientes del pasado,
luz interna, fragmentos de paraíso,
prueba de que existes
crucificando mi espacio.
Aquí están tus recuerdos,
protectores de mi locura,
tormenta azul.
Estremezco por completo
desdibujando entre sabanas
ilusión de la memoria,
detalles creados por la fantasía.
Hoy
A pesar de ese beso tan intenso,
el cielo sigue siendo azul
y una que otra nube
de cuando en cuando
oculta el sol,
justo en el momento
en que tu cordura,
se abre camino
a través de mis acantilados,
tornándote salvaje y amenazante,
pero eres tú quien está expuesto...
Exaltas lo contrario de la cordura,
te quejas del resultado,
te seduce mi locura,
que es la nuestra.
vuelve el brillo lozano
y sientes la brisa suave
de mis besos,
y es aquí donde quieres estar.